Germán Ávila, el cuarto en Hacienda bajo Petro

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El mandatario de Colombia, Gustavo Petro, ha designado a Germán Ávila como el nuevo titular del Ministerio de Hacienda, tras aceptar la dimisión de Diego Guevara, quien había estado al frente del puesto hasta febrero. Este ajuste convierte a Ávila en el cuarto ministro del sector económico durante la administración de Petro. Este nombramiento resalta la inestabilidad que ha marcado la gestión del Ministerio de Hacienda en los años recientes, con numerosos ministros dejando el cargo en un lapso comparativamente breve.

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha nombrado a Germán Ávila como el nuevo Ministro de Hacienda, luego de aceptar la renuncia de Diego Guevara, quien ocupaba el cargo hasta febrero. Con este cambio, Ávila se convierte en el cuarto ministro de Hacienda en el mandato de Petro. Este nombramiento pone en evidencia la volatilidad que ha caracterizado la gestión de la cartera de Hacienda en los últimos años, con varios ministros renunciando en un período relativamente corto.

Germán Ávila es un economista formado en la Universidad Nacional de Colombia y actualmente preside el Grupo Bicentenario. A lo largo de su carrera ha desempeñado roles clave en el ámbito de la vivienda, como gerente de Construcciones y Diseños Planificados y director ejecutivo de la Federación Nacional de la Vivienda Popular. Además, ha sido mencionado por Petro en su libro Una vida, muchas vidas

Uno de los mayores desafíos que tendrá Ávila será lograr la estabilidad del Ministerio de Hacienda, el cual ha experimentado diversas modificaciones en años recientes. Especialmente, la administración de Petro ha enfrentado obstáculos para retener a los ministros de Hacienda por extensos periodos. El tiempo promedio en el cargo para los tres últimos responsables de la cartera (José Antonio Ocampo, Ricardo Bonilla y Diego Guevara) ha sido de solo 9.6 meses, lo que ejemplifica una continua inestabilidad en el manejo económico del país.

El flamante Ministro de Hacienda enfrenta la ardua labor de recuperar la credibilidad y la confianza de las entidades internacionales y el mercado financiero. Durante los primeros meses del año, Fitch modificó la calificación de la deuda colombiana, cambiando su perspectiva de estable a negativa. Esta circunstancia ha intensificado la presión sobre el gobierno para gestionar eficazmente las finanzas públicas y prevenir un deterioro adicional en la confianza de los inversores.

El nuevo Ministro de Hacienda tiene la difícil tarea de restaurar la credibilidad y la confianza de los organismos internacionales y el mercado financiero. En los primeros meses del año, la calificación de la deuda colombiana fue ajustada por Fitch, que pasó su perspectiva de estable a negativa. Esta situación ha aumentado la presión sobre el gobierno para lograr un manejo adecuado de las finanzas públicas y evitar una mayor degradación de la confianza de los inversionistas.

Uno de los objetivos más inmediatos de Ávila será reducir el déficit fiscal, una tarea compleja dada la situación económica del país. Para ello, se espera que el nuevo ministro implemente reformas que mejoren el recaudo tributario, lo cual podría implicar la creación de nuevos impuestos o el ajuste de los existentes. La economía colombiana se enfrenta a una serie de desafíos, incluyendo la necesidad de promover el crecimiento económico, reducir la pobreza y mantener la estabilidad macroeconómica, mientras enfrenta los efectos de la inflación y los precios de los combustibles.

En cuanto a la política interna, Ávila deberá navegar las complejas dinámicas del gobierno de Petro, que ha experimentado tensiones internas y externas. Desde su llegada al poder, el presidente ha impulsado una agenda económica que incluye reformas estructurales, pero que también ha generado divisiones dentro de su propio partido y entre los sectores más conservadores de la sociedad colombiana. El nuevo ministro será clave para gestionar las expectativas y encontrar el equilibrio necesario para avanzar con las reformas sin generar una mayor polarización.